Hay lugares en el Planeta que con solo contemplarlos despiertan esa misteriosa intuición humana de lo sobrenatural y el más allá, lugares cuyo aspecto y configuración parecen escapar a toda explicación racional. Son sensaciones que se originan en el interior y que comparte la mayoría de las personas, un hecho cuya consecuencia inmediata, sobre todo en culturas antiguas, es declarar sagrados dichos lugares, como respuesta a una atracción incontenible. A lo largo y ancho del mundo, pueden encontrarse tantos lugares sagrados como culturas, y todos únicos, pero existen algunos que todo el mundo podría considerar especial. Es la magia del misterio que envuelve el universo y la existencia.
Para ilustrar esta reflexión, en Destinia.com hemos escogido una serie de lugares sagrados naturales que bien merecen una visita, en todos los continentes del Planeta. Son todos lugares considerados sagrados por las culturas locales, bien en la actualidad o bien en tiempos antiguos. La mayoría de ellos son montañas de difícil acceso. ¿Cuántos de ellos has tenido ocasión de contemplar? (Clic en las fotos para ampliarlas).
El monte Olimpo era la antigua morada de los dioses griegos, un lugar del que casi todos han oído hablar pero que muy pocos han visitado. Su mayor pico tiene 2.917 metros de altura, pero tiene un difícil acceso. Aunque los dioses griegos hace tiempo que se mudaron de allí, el monte Olimpo es actualmente Reserva de la Biosfera de la Unesco.
El monte Hua, cuyo nombre según cuentan significa «monte del Esplendor», es una de las cinco montañas sagradas del taoísmo y se encuentra en el centro de China, a orillas del río Amarillo. El taoísmo es la filosofía que acuñó el famoso concepto del yin y el yang, el cual parece plasmarse si se observa la fotografía en la pesada montaña y el ligero aire que la rodea. Los amantes de las emociones fuertes encontrarán una experiencia inolvidable subiendo hasta la cima por este estrecho sendero.
La vieja ciudad inca de Machu Picchu, a unos 2.400 metros de altitud, era un complejo religioso y palaciego donde los emperadores incas buscaban descanso y retiro. La ubicación no es casual, frente a Machu Picchu se encuentra el Huayna Picchu, un monte sagrado en la tradición religiosa incaica. Desde 1983, Machu Picchu es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco y desde 2007 se ha convertido en una de las nuevas maravillas del mundo.
El monte Emei se encuentra en la provincia de Cuatro Valles, al suroeste de China y alberga el primer santuario budista que se construyó en el país, allá por el siglo I de nuestra era. Es frecuente que la cumbre del monte Emei esté rodeada de nuebla y nubes que a veces produce una sensación óptica conocida como la «luz de Buda», lo que contribuyó a percibir el lugar como sagrado desde muy antiguo. Hubo quien se lanzó al vacío al ver la luz, creyendo que se trataba de una llamada del mismísimo Buda.
La Ayers Rock o gran roca de Uluru es uno de los mayores monolitos del mundo con sus 9 kilómetros de contorno. La tonalidad de la roca va variando en función de la luz del día, lo que pudo contribuir a que los aborígenes australianos la considerasen como sagrada, sobre todo el clan de los Aṉangu, que consideran que allí habitan quienes ordenaron el caos inicial del universo para crear todo lo existente. Actualmente, el Parque Nacional de Uluru-Kata Tjuta pertenece al Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
En el país donde tradicionalmente menos separada está religión del gobierno, el Tíbet —el líder espiritual, el Dalái Lama, es al mismo tiempo el dirigente del gobierno tibetano en el exilio—, se encuentra el monte Kailash. Al encontrarse en una zona de cruce de culturas entre China y la India, el monte Kailash tiene una significación diferente para unas religiones y otras. Según el hinduísmo, es el lugar donde reside el dios Shivá y al mismo tiempo el centro del mundo budismo, mientras que para los budistas sería el hogar de Buda. Cuentan los mitos que el campeón budista Milarepa retó al campeón Naro-Bonchung, de la religión Bön, a un combate entre magos que finalmente ganó Milarepa, introduciendo el budismo en el Tíbet.
Los desfiladeros de Bandiagara se encuentran en la región conocida como país Dogón y tienen la increíble extensión de 200 kilómetros, unas dimensiones que empequeñecen al ser humano y le hacen preguntarse acerca del poder del universo. En ellos habitaba el pueblo dogón, en sus paredes, salvándose así de los traficantes de esclavos que recorrían la zona en torno al siglo XV. Actualmente, los farallones de Bandiagara, en Malí, pertenecen al Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
El monte Carmelo es uno de los lugares sagrados más importantes de la imaginería cristiana. Según la Biblia, el profeta Elías demostró allí que el Señor de Israel es el verdadero dios. Se supone que allí o en sus alrededores tendrá lugar la batalla de Armagedón en el final de los tiempos. Además de todos estos mitos, el monte Carmelo tiene un papel importante en la evolución humana, ya que allí se encontraron restos de humanos neandertales y sapiens.
¿Has tenido la suerte visitar alguno de estos lugares sagrados? ¿Tenías ya alguno en el punto de mira? ¡Si eres una persona ligeramente espiritual, seguro que estos sitios no te dejan indiferente!
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