Algo nuevo, algo azul, algo viejo y algo prestado, ¿te suena? En mayo comienza la temporada de bodas. Pero si cada vez que recibes una invitación a alguno de estos eventos te llevas las manos a la cabeza porque todas te parecen iguales y no te apetece ir, te vamos a presentar las celebraciones matrimoniales más peculiares del mundo para que si alguna vez te invitan a una boda en Japón o India no tengas la menor duda y digas bien alto: ¡Si, quiero!
Si los japoneses son de por sí ceremoniosos para cualquier acto de su vida diaria, imagínate lo especial que tiene que ser una de sus bodas. Cada cónyuge viste con trajes tradicionales sintoístas y al llegar al templo en medio de un ambiente de absoluto silencio, los novios pronuncian unos breves votos, beben tres veces de unos pequeños vasos de sake y realizan ofrendas para convertirse en marido y mujer. Una boda muy escueta y sobria que nada tiene que ver con el excesivo vestido de la novia, un kimono blanco de varios kilos de peso que se completa con el tocado “tsuno-kakushi” que simboliza su pureza.
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Si te invitan a una fiesta repleta de vibrantes colores, collares de flores, rica y abundante comida con sabor a especias, bailes alrededor del fuego y que, además, durará como mínimo tres días, ¿no irías encantado? Pues que sepas que estarías acudiendo a una boda hindú. Éste es sin duda, uno de los ritos matrimoniales más espectaculares del mundo donde el novio acude a caballo o incluso a lomos de un elefante a buscar a su prometida acompañado de una comitiva de músicos y bailarines. ¡Todo un espectáculo digno del mismísimo Bollywood!
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Si piensas que para encontrar bodas con tradiciones peculiares tienes que volar a la otra punta del mundo estás muy equivocado, basta con que viajes a Alemania. En el país germano, una ceremonia del matrimonio no se termina hasta que los novios no dicen sus votos y a continuación parten un tronco en dos con ayuda de una sierra como símbolo de unión ante los problemas que se encontrarán en el futuro. ¿Te imaginas la situación? «Mamá, sujétame el ramo que tengo que ir un momento a partir leña con mi marido».
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¿Quién dijo que para casarse hay que ir con traje y una original pajarita? Porque si viajas a Sudáfrica, Zimbabue, Zambia o Mozambique y tienes la suerte de presenciar una boda zulú lo último que harás será quedarte al margen. Los invitados te darán la bienvenida y te prestarán parte de sus vistosos tocados y pieles de leopardo para animarte a participar de sus danzas tribales y simbólicos rituales y así desear suerte y prosperidad a los novios. Así que anímate, únete a la fiesta ¡y disfruta de una boda salvaje!
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Si ninguna de estas originales bodas te acaba de convencer, entonces tendrás que volar hasta la mítica ciudad de Las Vegas para que el mismísimo Elvis Presley te case en una ceremonia exprés en la mítica Little White Chappel, en un altar rodeado de luces de neón y teniendo de padrinos a Marilyn Monroe y Michael Jackson. Y ya que te casas en esta fabulosa ciudad, podrías pasar en ella unos días ¡y presume de una luna de miel tan original como inolvidable!
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Como hemos visto en estos 5 ejemplos de bodas atípicas, cada cultura es un mundo… ¿No te gustaría asistir a alguna boda diferente a lo que estás acostumbrado? ¿A cuál te encantaría que te invitaran?
Y después de tanto hablar de bodas… A lo mejor el próximo que se casa eres tú, comienza a organizar tu fantástico viaje de novios a algún destino exótico o de esos que siempre pospones por tiempo y presupuesto.
¡Vivan los novios! y sobretodo… ¡Viva viajar con tu compañer@ de vida!