Pueblos bonitos en España hay muchos (sin duda) y elegir los más bonitos es muy complicado, casí una tarea titánica que levanta paisones. Sabemos que nuestro país está lleno de rincones y pueblos con mucho encanto (con y sin mar) dignos de entrar en esta selección, pero nos hemos llevado por el corazón y hemos elegido estos. Prometemos que el tema da para más.
Algunos de estos pueblos nos traen recuerdos de la infancia, como un día de picnic de ésta que escribe en las playitas de Zahara de la Sierra, otros nos llevan a pensar en comer y beber –imposible olvidar la tarta de Mondoñedo y el vino de Laguardia–. Y otros nos trasladan al pasado como Ciudad Rodrigo y Almagro. Por algo dicen que la vida es beber, comer y recordar.
Mondoñedo es una pequeña ciudad de Lugo con una gran historia y tradición, tanta que fue capital gallega cuando Galicia aún tenía siete provincias. Actualmente seguro que habrás escuchado alguna vez que este precioso pueblo guarda una de las mejores tartas de España, las de «O rei das tartas» o caído en tus manos algún libro del reconocido escritor Álvaro Cunqueiro, nacido aquí.
Si visitas Mondoñedo no debes perderte su catedral y su plaza. La catedral de es la menos conocida de Galicia pero tiene todos los elementos de un precioso edificio religioso de estilo medieval y verdaderos tesoros en su museo, que merece mucho la pena visitar, junto a su claustro.
Pero si quieres descubrir el encanto de este pueblo acércate hasta su barrio dos Muíños, por muchos llamado la Venecia gallega, un entramado de calles, riachuelos, canales y casas de piedra donde en tiempos atrás se hospedaban las personas que trabajaban con la piel gracias a sus molinos. Ahora si paseamos por estas calles veremos un centro artesanal de elaboración de madreñas (zapatos típicos gallegos) y otros objetos tradicionales con exposición de piezas.
Si visitas Mondoñedo acércate a la Playa de Las Catedrales, a tan solo veinte minutos es una de las más impresionantes de Galicia por sus acantilados.
Un clásico de Mondoñedo es A Taberna do Valeco con comida tradicional gallega y platos de carne de caza y pescados del mar Cantábrico y la costa de Lugo. No te olvides de visitar a O rei das tartas y comprar su famosa tarta.
En Mondoñedo encontraras varios hoteles que te permitirán disfrutar de los encantos de la zona y sus impresionantes playas, sin olvidar su gastronomía tradicional.
Foto de galiciaenpie (Instagram).
Al pisar Laguardia, en La Rioja alavesa, te trasladarás a una tierra de vinos donde parece que estas en La Toscana italiana, con carreteras llenas de viñedos. La ciudad está amurallada y dentro encuentras un entramado medieval precioso que te transporta a otra época.
La joya de Laguardia es el pórtico gótico de su catedral Santa María de los Reyes, una auténtica obra de arte que no debes perderte. Igual que el recorrido por la muralla y sus cinco puertas, donde encontraras el paseo del Collado con impresionantes vistas de la zona y algunas casas muy bien conservadas con sus ventanales góticos. No olvides también visitar la casa del fabulista Samaniego, una casa señorial del s. XV increíblemente conservada. El museo del Centro Villa Lucía te descubre las tradiciones vitivinícolas de la zona.
Pero si por algo hay que visitar Laguardia es por sus bodegas, más de 300 cuevas excavadas, muchas visitables previa cita, como la de El Fabulista en la plaza de San Juan. Si quieres descubrir lo más novedoso del vino de Laguardia vista las bodegas de Ysios, con la sierra de Cantabria de fondo te impresionará el edificiobodega , única bodega del mundo diseñada por Santiago Calatrava, integrado plenamente en el paisaje. Aquí además se elaboran los vinos más novedosos del S. XXI.
Disfruta de la gastronomía vasco-riojana con unas vistas espectaculares a los viñedos en Marixa o pide mesa en Posada Mayor de Migueloa con platos de la cocina riojana y de vanguardia maridados con vinos propios.
En pleno corazón de LaGuardia e ideal para una escapada romántica hospédate en el Hotel Hospederia Los Parajes, un concepto de hotel diferente, donde historia y modernidad se conjugan para albergar un conjunto de espacios y servicios llenos de sensaciones. ¡Solo 18 habitaciones!
Trujillo es una coqueta ciudad extremeña en la que todo gira alrededor de su plaza mayor y puesta en el mapa por su personaje ilustre que la preside: Francisco Pizarro, quien conquistó Perú y fue uno de los hombres más importantes del histórico descubrimiento de América.
En un paseo por sus callejuelas estrechas y empedradas descubrirás una alcazaba árabe construida en tiempos del emirato omeya de Córdoba y que antes de ser una fortaleza andalusí fue un campamento romano. O la iglesia de San Martín, de una sola nave, con un reloj que marca la hora de la ciudad. También visita sus palacios más importantes como el de los Duques de San Carlos, frente a la puerta de Limas o el palacio de los Marqueses de Piedras Albas, y el del Marqués de la Conquista, promovido por Hernando Pizarro, hermano del conquistador.
Trujillo es un pueblo bullicioso y alegre que invita a ser vivido y paseado por lo que lo mejor a la hora de comer es sentarse en uno de sus veladores muy concurridos por sus vecinos en la plaza mayor y descubrir los productos gastronómicos de la zona de Cáceres como el queso con un buen vino.
En el antiguo convento de Santa Clara se abre el Parador de Trujillo, que conserva el ambiente de paz y sosiego de su estructura conventual y desde el que podrás descubrir uno de los pueblos con más encanto de Extremadura y sus alrededores.
Puebla de Sanabria está declarada Conjunto Histórico Artístico por la singularidad de sus monumentos y su cuidada arquitectura, protegida por la muralla y famosa por su Castillo-Palacio de los Condes de Benavente del s. XV que servía como escudo de protección de la zona siglos atrás y actualmente es el museo principal del pueblo. Visita la Iglesia de Santa María del Azogue, una de las construcciones más antiguas de estilo románico. Se encuentra en la plaza mayor, frente al Ayuntamiento porticado, y adosada a ella se encuentra la Ermita de San Cayetano.
Una de las tradiciones de la zona son los Gigantes y Cabezudos de Puebla de Sanabria, que representan personajes de la cultura tradicional; estos trajes típicos y máscaras de la zona los puedes ver en la Casa Museo de Gigantes y Cabezudos y el 8 de septiembre en las calles.
En esta escapada a uno de los pueblos más bonitos de España no puedes perderte el Lago de Sanabria, lago glaciar más importante de España, o la reserva del lobo ibérico.
Además de por sus monumentos y sus gigantes y cabezudos, Puebla de Sanabria es conocida por su gastronomía, entre sus platos más populares están el caldo Sanabrés, el pulpo a la Sanabresa, las carnes de vacuno y las setas de la comarca. Pruébalos en Mesón Abelardo.
Si quieres pasar unos días y visitar el famoso lago lo ideal es hospedarse en uno de estos hoteles de Puebla de Sanabria.
Foto de @cannonball_z (Instagram).
Entre Salamanca y la frontera con Portugal se esconde uno de los pueblos más bonitos de nuestro país, Ciudad Rodrigo, lleno de historia gracias a sus pobladores desde la prehistoria. El sabor del pasado ha quedado grabado en sus murallas y monumentos como la impresionante catedral de Santa María, que se tardó dos siglos en acabar, o el Palacio de los Águila también llamado Casa del Principe o del Marqués de los Altares de estilo renacentista. Si te gusta estar en contacto con la naturaleza, haz una ruta por el río Agueda y descubre el paraje más natural de la zona.
En Ciudad Rodrigo se encuentra uno de los museos más originales de España, el museo del Orinal. Situado en un edificio de piedra del siglo XVIII que formó parte del Seminario Diocesano de San Cayetano, en la zona monumental de la ciudad junto a la Catedral de Santa María y la muralla, aquí podrás hacer un divertido viaje por el tiempo a través del orinal, uno de los objetos cotidianos más usados de todos los tiempos.
No puedes irte de Ciudad Rodrigo sin probar uno de sus platos más típicos los huevos con farinato, un embutido hecho en Salamanca, pide mesa en el Mesón El Charro para probarlos.
Si quieres dormir en uno de los sitios con más historia de Ciudad Rodrigo, hospédate en el Parador de Ciudad Rodrigo, muy cerca de la Plaza Mayor y desde su muralla se ve unas impresionantes vistas de sus verdes alrededores.
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Dar un paseo por las calles de Almagro nos transporta en el tiempo para rememorar su pasado, descubrir la leyenda de monjes guerreros y caballeros, conocer sus iglesias y conventos, o descubrir el Barrio Noble conservado en perfecto estado con sus casas blasonadas del Mayorazgo de los Molina, de los Rosales, la Casa del Prior o la del Capellán de las Bernardas.
La visita a Almagro también nos enriquecerá culturalmente gracias a su famoso Festival Internacional de Teatro Clásico. Y hablando de teatro, visita El Corral de Comedias, el lugar clásico donde se representaban las obras teatrales durante el Siglo de Oro español, y el único que se ha conservado intacto y en activo desde principios del siglo XVII.
Otro edificio que merece la pena visitar en Almagro es el Almacén de los Fúcares, antiguo almacén del mercurio de las minas de Almadén de la familia Függer, antiguos prestamistas del emperador Carlos V, con un impresionante patio típico de las construcciones del siglo XVI. Actualmente es un centro cultural.
Y si te gusta la naturaleza, no olvides visitar las Tablas de Daimiel, un parque nacional con un entorno fluvial increíble.
Prueba la gastronomía manchega y en espacial la berenjena de Almagro en los restaurantes de la Plaza Mayor como en Casa Toñi o Bar Quijote Gil.
A cinco minutos andando de la Plaza Mayor está el Parador de Almagro. El edificio es un antiguo convento del S XVI, muy acogedor y tranquilo, es el lugar ideal donde hospedarte para conocer todos los rincones de Almagro.
Foto de @benrobertsphoto (Instagram)
El tiempo se detiene cuando visitas Santillana del Mar, conocida popularmente como la villa de las tres mentiras, porque ni es santa, ni llana, ni tiene mar (si está cerca, visita la playa de Santa Justa). Gracias a sus calles adoquinadas, casas de piedra y ese espíritu medieval que se respira está declarado Conjunto Histórico Artístico.
Santillana del Mar es ideal para visitar con niños ya que una de las recomendaciones cuando visitas este bonito pueblo es pasar una jornada en Cabárceno, donde hay más de 2000 animales y estarás en un entorno natural en contacto directo con la naturaleza cánatbra. Otro plan es visitar el Parque de la Alianza que comparten con sus vecinos cercanos de Suances, allí hay actividades especiales para los más pequeños y zonas para hacer barbacoas con la llegada del buen tiempo. También puedes acercarte hasta las famosas cuevas de Altamira y descubrir el arte rupestre de la zona, el mejor conservado de nuestro país.
Para probar la tradición gastronómica de la zona y sus barbacoas visita el Restaurante Casa Cossio en el centro del pueblo junto a la colegiata. Ideal también para desayunar unos buenos churros con chocolate.
Lo ideal para hospedarte en Santillana es elegir una hotelito rural o una posada.
Nos escapamos hasta las Islas de Canarias para conocer uno de los pueblos más bonitos de España y justo en el centro de Gran Canaria se esconde Tejeda. Una villa ubicada en una caldera volcánica tan típica de las islas y que tiene impresionantes paisajes naturales como el Roque Nublo (uno de los mayores del mundo) y el Roque Bentayga.
En este pueblo los que practican la escalada tendrán horas y horas para entrenarse en un entorno ideal para trepar montañas, un poco abrupto si no tienes mucha experiencia. El senderismo y la caza forman parte de las actividades de la zona por lo que si te gusta el turismo activo esta es tu escapada ideal.
Para los más tranquilos proponemos visitar el Museo de las Tradiciones, una casa tradicional canaria, donde descubrimos la historia de Tejeda y sus costumbres. También puedes visitar el museo del escultor e hijo del pueblo, Abraham Cárdenes, donde se exponen muchas de sus obras.
Te proponemos que te acerques a uno de los bochinches de la zona que no es más que un bar de tapas donde degustar de los vinos de la zona. No te olvide de pedir unas papas arrugadas con mojo.
Hay numerosos complejos hoteleros que te ofrecen piscina y todas las comodidades posibles muy cerca de Tejeda, incluso algunos con pulserita todo incluido, pero si de verdad quieres conocer la zona y hacer turismo activo hospédate en una casa rural típica canaria o en el Parador de Cruz de Tejeda.
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Enclavado en una peña de los Montes Universales sobre el río Guadalaviar (un tramo del río antes de llamarseTuria), Albarracín es un pueblo con encanto y que cuenta su historia entre sus pasadizos, muros irregulares de edificios de piedra, su muralla, castillos e iglesias algunas tan espectaculares como el Salvador, antigua catedral de la zona. En su punto más alto está la Torre del Andador del siglo X. No debes perderte las ruinas de un alcázar, un castillo de origen árabe que se alza sobre un acantilado.
Sin dudarlo la joya de Albarracín es la casa Julianeta del siglo XIV, tan inclinada que parece a punto de derrumbarse pero que se sujeta por sus dos calles en cuesta. Ahora mismo esta casa es utilizada como taller para artistas del pueblo.
Si te gustan los dinosaurios, visita Mar Nummus en Dinopolis. Aquí podrás ver un ejemplar del mayor depredador hasta la fecha, el Liopleurodon, un gigantesco reptil que vivió en los mares jurásicos.
Tiempo de Ensueño, un restaurante de cocina creativa pero tradicional cerca de la famosa casa Julianeta, en su menú hay ternasco de Aragón, el famoso jamón de Teruel, la trufa negra y otras delicias de Teruel.
Si quieres descubrir Albarracín y sus alrededores hay varios hoteles en donde hospedarte unos días, como las 43 habitaciones con vistas del Hotel Albarracín.
Con sabor a monte, llena de callejones encalados, y en pleno corazón del Parque Natural Sierra de Grazalema se esconde la encantadora Zahara de la Sierra, no confundir con Zahara de Los Atunes también en Cádiz, uno de los pueblos más bonitos para veranear con su magnífica playa de aguas azules bañadas por el Atlántico).
Zahara de la Sierra es uno de esos pueblos llamados “de mirador” por su especial ubicación, en el Monte del Jaral, a más de 500 metros de altura. Paseando por el pueblo encontrarás preciosos balcones con vistas maravillosas a toda la Sierra de Cádiz y al embalse que en días claros parece teñido de turquesa. El pueblo forma parte la famosa Ruta de los almoravides y almohades y en todas sus calles irás viajando al pasado y conociendo su historia, que le ha hecho ser nombrada en 1983 Conjunto Histórico-Artístico. No hay que olvidar ver las ruinas del Castillo y la Torre del Homenaje de época medieval.
Si visitas Zahara de la Sierra con buen tiempo, visita Las Playitas, una playa artificial hecha a partir del cauce del Rio Guadalete, rodeada de huertas y árboles frutales, ideal para pasar un día de picnic con niños.
Como en casi todos los pueblos de la Sierra de Cádiz, en la gastronomía zahareña destaca sus sopas “hervías” como la de ajo o tomate, hechas con productos silvestres y de huerta, que puedes probar en el popular restaurante Los Tadeos. No te vayas de Zahara de la Sierra sin probar el queso payoyo, considerado como uno de los mejores quesos del mundo y el dulce de membrillo, tan típico de esta zona que durante un tiempo el pueblo fue conocido como Zahara de los Membrillos.
Seguro que encontrrás relax en este hoteltito de solo 16 habitaciones con camas con dosel y vistas: Hotel Rural Arco de la Villa.
¿Y para ti cuál es el pueblo más bonito de España? Si te parecen pocos o no encuentras el tuyo siempre puedes consultar estos otros artículos que ya hemos publicado: Los pueblos más bonitos de Aragón; de ruta por los pueblos más bonitos de Málaga; o por los pueblos con encanto de Madrid; Asturias vista en 8 pueblos con encanto y los pueblos más bonitos de España (según los amigos de Facebook) parte I y parte II.