La Comunidad Valenciana es uno de los destinos preferidos de todos los turistas, y es que la tierra de las Fallas, la horchata y la paella tiene una armoniosa combinación de elementos que hace feliz a todo el mundo: un clima espectacular la mayor parte del año, una luz magnífica, una gastronomía famosa en todo el globo, festividades la mar de divertidas y una geografía variada, cuyo elemento estrella son sus playas y terrazas frente al mar.
Veamos una selección de los infinitos lugares maravillosos que podríamos visitar en esta cálida región mediterránea
Si lo que te apetece es pura naturaleza mediterránea, una excursión muy prometedora puede ser visitar este parque natural en la costa de Castellón, entre la célebre Peñíscola, Santa Magdalena de Pulpis y Alcocéber.
Zona montañosa cubierta de vegetación, es una de las extensiones más grandes del litoral levantino sin edificar, lo cual no es poco tratándose de una zona tan turística. Subir hasta sus miradores para mirar de frente al inmenso mar y sus hermosas playas y calas, es un agradable paseo que vale mucho la pena.
Situada a una hora de Valencia capital, cerca de Quesa, se encuentra esta encantadora cadena de charcas con cascada, a la que sólo se puede acceder con el coche. Esta formación geológica de cuatro piscinas naturales es impresionante, y lo es aún más por el color turquesa verdoso de su aguas, en las que puedes estar un buen rato a remojo bajo el sol o darte un masaje con el agua de la cascada al caer.
Juntamos ambas ciudades porque están tan cerca que se pueden visitar en un mismo día. Y si tienes más tiempo y ganas, también deberías darte una vuelta por sus vecinas Denia y Jávea. Estas perlas costeras alicantinas son todo un regalo para los sentidos.
Sus cascos antiguos encarnan la típica esencia mediterránea, con sus casas blancas, sus buganvillas, placitas con terrazas donde el tiempo se para, y por supuesto, unas playas preciosas (algunas de estas playas y calas han sido premiadas).
El mayor atractivo de Altea es su Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, con sus dos cúpulas, símbolo de la ciudad. Y en el caso de Calpe, irá por siempre jamás ligada al imponente Peñón de Ifach, como un Neptuno saliendo del mar.
Morella se ha ganado a pulso estar en la guía de los pueblos más bonitos de España. Situada en el interior extremo norte de la región, impresiona y enamora a partes iguales.Con una fuerte carga histórica
, y a más de 1000 metros de altura, tiene un conjunto histórico-artístico del que destacan su castillo y sus casi dos kilómetros de muralla centenaria. En cualquier estación es bonita, pero verla en invierno nevada te hará sentir como el “Rey (o la Reina) en el Norte”.
Zona del interior de gran belleza, nos encontramos en un medio totalmente rural entre sus montañas, sus huertas y los ríos Ebrón, Turia y Bohilgues. Aquí cambiamos el clima mediterráneo por el continental, por lo que en verano es mucho más seco.
Destaca su casco urbano con las antiguas ruinas del castillo, sus iglesias y especialmente la Ermita de la Virgen de la Huerta, que es la joya de la corona. Es una zona ideal para reconectarnos con la naturaleza y cargar pilas.
Si te gusta el senderismo, no dejes de visitar esta zona.
Este pueblo medieval encantador de tan solo 208 habitantes es otro de los certificados como más bellos de nuestro país. La culpa la tienen sus raíces musulmanas, su castillo (el famoso Castillo de Guadalest), su embalse y su situación geográfica, que coloca al pueblo en un valle entre la Sierra de Xortà y Serrella, la Sierra de Aitana y la Sierra de Bernia. ¡Y además, se come de muerte!
Este insólito enclave es uno de los tesoros mejor guardados de la Comunidad. Única isla (archipiélago de 4 islitas, en realidad) de la geografía valenciana, y con apenas 55 habitantes, cuando vas a Tabarca tienes la sensación de estar suspendido en el tiempo y en el espacio.
Aguas azul intenso por todas partes, casitas blancas, callecitas decadentes y apenas cobertura móvil… si te gusta lo sencillo y minimalista, prepárate para un flechazo en toda regla.
Bueno, “Bocairent”, excepto playa, lo tiene todo. Con una ubicación privilegiada al lado de la Sierra de Mariola, es un pueblo precioso con su casco antiguo espectacular, las “covetes dels moros”, el monasterio rupestre, las fuentes y los puentes, la iglesia parroquial, varios museos y unos restaurantes y tiendas de comida artesanal para chuparse los dedos.
Además, en su lugar muy entretenido y animado, puesto que prácticamente empalman una fiesta con otra durante todo el año. ¡En Bocairente te divertirás seguro!
Como puedes ver, no te faltan destinos interesantes por ver y conocer en la Comunidad Valenciana para disfrutar en tus días libres