Por miles de razones. La capital nipona es una de las ciudades más pobladas del planeta con una cultura sorprendente que no te dejará indiferente. Es distinta, interesante y entretenida. Tiene una vida nocturna animada y luminosa, barrios donde comprar todo lo que se te pase por la cabeza, una gastronomía conocida mundialmente y 38 millones de personas con las que convivir. Tanto por ver y visitar puede abrumar al viajero, así que te lo vamos a poner muy fácil. Hemos querido destacar lo mejor de Tokio para visitar si solo tuviéramos 24 horas. Ropa cómoda, tu cámara de fotos (para pasar desapercibido) y muchas ganas de sorprenderte. ¡Apunta bien qué ver en Tokio!
Para empezar nuestra ruta elegimos una de las mejores vistas de la ciudad. Situada en Minato-ku, la torre de Tokio está inspirada en la famosa Torre Eiffel pero con los colores de la bandera de Japón; rojo y blanco (pura coincidencia, ya que los colores son debido a la regulación de aviación). Es originariamente una torre de comunicaciones, pero en los últimos años se ha convertido en uno de los atractivos turísticos de la ciudad que no nos podemos perder.
Es la residencia del emperador de Tokio y un oasis en el centro de la ciudad. Los turistas pueden visitar sus jardines así como alguna de las instalaciones del palacio. La jornada de puertas abiertas atrae a muchos curiosos y solo se celebra en dos fechas al año; por el día del cumpleaños del emperador (23 de diciembre)y en día de año nuevo en Tokio (2 de enero).
Foto: Antonio Tajuelo (CC BY 2.0)
Tras conocer la parte más tradicional, podemos ir a la conocida como la «Quinta Avenida de Tokio» por su parecido a la famosa de Nueva York. Mucha gente en la calle, tiendas de lujo, comercios y numerosos carteles luminosos. Es Tokio en estado puro, ¡no te lo puedes perder!
Foto: Brettwayn (CC BY-NC-ND 2.0)
El famoso cruce lleno de transeúntes que tanto hemos visto en las películas y que no debes dejar de visitar. Además es el punto de encuentro más conocido entre los habitantes de Tokio. No apto para personas que se agobien con las multitudes.
Para acabar nuestra visita a Tokio, el barrio más animado y conocido de Japón; Shinyuku. Es la estampa más conocida, con luces de neón, locales animados, karaokes, gente «fashion» y los bares más modernos y a la última de la ciudad. Para acceder a esta zona, nos debemos de bajar en Shinjuku, la estación de metro más transitada de Tokio, seréis tú y unos 3 millones de viajeros al día.
Nuestra recomendación para comer se encuentra callejeando por el barrio Omotesando Hills, en un restaurante llamado Okonomiyaki Yai Ya. Este restaurante es especialista en Okonomiyaki (pequeñas tortillas con tallarines y un ¡gran número de ingredientes!) y puedes ver todo el proceso de elaboración.
Si te has quedado con ganas de más, y dispones de unas pocas horas, no te puedes perder el barrio futurista de Tokio. Se trata de Odaiba, una pequeña isla artificial construida en la bahía a la que podemos acceder a través de Rainbow Bridge. Construida inicialmente con motivos defensivos, hoy en día es una importante zona comercial, residencial y de ocio.
No puedes irte de Tokio sin visitar el mercado de pescado más grande y transitado del mundo (y escenario de películas de cine). Podrás ver las lonjas de pescado, las subastas y si te atreves, comprar alguno de sus deliciosos pescados.
Foto: Antonio Tajuelo (CC BY 2.0)
Con estos planes te aseguramos que te llevarás una buena experiencia de Tokio. No obstante, es una ciudad que merece la pena visitarla unos cuantos días y empaparte de su cultura. ¿Quizás sea tu próximo destino?
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