Viajar en sillas de ruedas hoy en día es perfectamente posible. El mundo se adapta y hay cada vez más sitios disponibles para que puedas disfrutar de unas vacaciones alucinantes sin barreras.
El turismo accesible se expande hoy por todos los rincones del mundo. Una realidad que abre la posibilidad de viajar a todos sin obstáculos de ningún tipo. Son cada vez más los lugares adaptados para favorecer el acceso y la estancia de personas con movilidad reducida. Pero no solo nos referimos a los hoteles o a otras instalaciones turísticas, sino también a los medios de transporte públicos, a la infraestructura urbana, a los parques, etc.
En países de Latinoamérica son cada vez más los establecimientos acondicionados para recibir visitantes con discapacidades. Países como Brasil, Uruguay, Chile y Argentina han desarrollado importantes proyectos para posibilitar el turismo accesible. En Argentina, por ejemplo, merece tu atención el parque natural Iguazú, que cuenta con plataformas y rampas accesibles por todo el parque.
Europa es otro continente en el que cada vez hallamos más lugares a los que se puede viajar en silla de ruedas. La ciudad de Salzsburgo en Austria ha sido premiada por eliminar sus barreras arquitectónicas. Desde los hoteles hasta los espacios culturales y restaurantes, la ciudad ofrece una guía con todos los lugares accesibles de la zona.
También Nantes (Francia) ofrece una aplicación móvil para que las personas con necesidades especiales puedan disfrutar de todas las ventajas de la ciudad. De hecho, su mayor logro es haber convertido un castillo del siglo XV en un lugar completamente accesible, gracias a sus rampas y ascensores.
La ciudad de Dublín es otra capital recomendada para viajar con silla de ruedas. Todos los medios de transporte, comercios y zonas urbanas están adaptados para personas con problemas de movilidad. Por ejemplo, la Catedral de San Patricio y la fábrica de Guinness, donde hay un grifo especial para que las personas que van en silla de ruedas se puedan servir su cerveza.
En España destacan ciudades como Tarrasa, Burgos, Málaga u Oviedo. Son destinos que cuentan con la infraestructura necesaria para el acceso a todos los lugares de interés en silla de ruedas. En Ávila, por ejemplo, se modificó la muralla de la ciudad para incluir un ascensor y un baño adaptado a personas con movilidad reducida.
También, puedes realizar senderismo en parajes naturales adaptados como la Sierra de Albarracín en Teruel.
Para preparar un viaje en silla de ruedas es muy importante planificarlo todo con antelación. Dedica tiempo a informarte sobre las condiciones de accesibilidad de tu destino. Puedes apoyarte en la experiencia de otros viajeros o consultar las dudas con tu agencia de viajes. Además, deberás tener en cuenta las siguientes cuestiones:1. Escoger un alojamiento adaptado a tus necesidades. Ten en cuenta no solo el establecimiento, sino también sus alrededores.2. Investiga los medios de transporte que tendrás a tu disposición. A este respecto, recuerda llevar un dinero extra por si te vieras obligado a contratar un taxi adaptado.
2. Contrata un seguro de viaje que te cubra en todas las situaciones posibles, incluyendo cualquier incidencia técnica de tu silla de ruedas. No olvides preparar un listado con talleres de reparación cercanos por si las moscas.
3. Al comprar los vuelos, asegúrate de reservar asientos para personas con movilidad reducida e infórmate de las condiciones de facturación y de acompañamiento en el aeropuerto.
Como ves, viajar en sillas de ruedas ya no es un obstáculo para conocer el mundo. Solo tienes que proponértelo y emprender la aventura de la mano de una sociedad que cada vez tiene más en cuenta a las personas con movilidad reducida y su inclusión para el disfrute de todos.